desalación doméstica 
La naturaleza nos da el agua incolora, inodora, cristalina, transparente,
autodepurada por ella misma es fuente de vida y de salud. Pero en
realidad no es así tal y como nos llega a nuestras casas.
En su ciclo, el agua arrastra los contaminantes que nosotros mismos
expulsamos a la atmósfera, y también materias orgánicas,
desechos vegetales, animales y disuelve productos químicos.
El agua se filtra y penetra por las diferentes capas. Por ser un
disolvente universal, disuelve sales, calcio, magnesio, hierro,
etc...
A nivel doméstico utilizamos el mismo agua para regar, limpiar,
asearnos, cocinar... Y al igual que los profesionales deberíamos
adaptar el agua para los distintos usos. Para ello empleamos las
diferentes técnicas al alcance para adecuar el agua a cada
uso específico, ya que a la mayoría de los usos (hacer
la colada, calefacción, aseo, etc...) les afecta enormemente
la cal. El contenido de sales de calcio y magnesio en el agua es
lo que conocemos como dureza ( que se mide en ºF grados franceses).
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Descalcificación